La marca lleva como logotipo a un cerdo volador. El animal proviene de un lugar donde la imaginación es reprimida y se escapa a los andes para liberarse, cuenta Julio.
Beber un vaso de cerveza no es una trivialidad, al menos no para Julio Espinosa, quiteño de 31 años y experto en la producción de cerveza artesanal.
Por eso creó su propia marca, Andes Brewing Co., en 2012 que, más allá de solo vender el producto, apuesta por brindar calidad y experiencia a sus consumidores.
Así es que la elección de este singular cerdo fue para “desarrollar una identidad completamente auténtica”.
Julio estudió Relaciones Internacionales en la Universidad San Francisco de Quito. Sin embargo, aproximadamente hace seis años dejó de ejercer la profesión para dedicarse de lleno a lo que en verdad le apasiona.
Empezó preparando recetas caseras de cerveza los fines de semana mientras trabajaba en una consultora política. Pero abandonó el trabajo y viajó a Inglaterra. Allí siguió un curso de cervecería durante tres meses y al regresar inició su emprendimiento.
Al principio Julio llevaba el negocio solo, desde preparar la cerveza hasta manejar la publicidad. Su empresa ha crecido significativamente y ahora tiene más personal de apoyo.
Distribuye la bebida en varios puntos de la capital y de la región, pero su objetivo se mantiene. Para la familia andes el tema de calidad es fundamental. “Somos una cervecería que todavía somos muy pequeños. No hemos querido crecer de forma tan apresurada porque siempre nos ha gustado mantener altos estándares de calidad”, explica Julio.
La expansión de cervecería artesanal dentro del país exigió la creación de la Asociación de Cervecerías del Ecuador en 2014, presidida por Julio Espinosa hace un par de años. En un inicio la asociación estuvo conformada por alrededor de 40 empresas.
Actualmente Espinosa estima que existen 100 plantas de cervecería artesanal. Si bien el precio de una cerveza como la de Andes es más costosa que una convencional, el público ha respondido positivamente. Sin embargo, según Espinosa “todavía falta mucho educar y culturizar a la gente”.
Andes produce 15 tipos distintos de cerveza, algunas con curiosos aromas frutales y otras con aromas a café y chocolate. La empresa aún se está posicionando, pero Julio Espinosa ya tiene planes a futuro, como abrir un bar y exportar el producto.
El lema de la Andes es “reinventarse o morir”, pues precisamente en eso consiste el éxito de su empresa.
