Elizabeth (nombre protegido) tiene 20 años y ha ido al ginecólogo sólo dos veces en su vida. Cuando tenía 10 años solía tener infecciones. La única vez que su madre la llevó fue en su niñez porque la ginecóloga que la atendió le preguntó si era sexualmente activa: “pero ¿es virgencita no?”. Aquella pregunta la marcó para siempre. Lo que la llevó a pensar que tener citas con la ginecóloga es solamente para mujeres con una vida sexual activa.
La Dr. Viviana Paredes explica que usualmente sus pacientes empiezan a controlar su salud a partir de los 20 años. “Llegan cuando ya han empezado una vida sexual o porque creen que algo está mal. Es muy inusual que llegue una joven a obtener información sobre cómo llevar una vida sana en el cuidado vaginal”, dice.
“No hay una edad específica para venir al ginecólogo, pero sí es importante que las adolescentes se informen de cómo funciona su cuerpo. Por ejemplo, es muy común que sufran de ovarios poliquísticos y mientras más pronto se atiendan, mejor”, añade. “Hay que liberarse de tabúes y ser responsables. Gracias a esto se evitan embarazos no deseados y más importante aún, enfermedades de transmisión sexual”, concluye.
Elizabeth tomó la decisión de asistir al ginecólogo sola, sin el acompañamiento de su madre, por vergüenza. El psicólogo y profesor Jonathan Lucero cuenta que este sentimiento se da porque no hay un diálogo de los padres hacia los hijos sobre sexualidad. “Un adolescente rara vez habla del tema con sus papás porque se transforma en un tema incómodo para ellos. Al final del día terminan aprendiendo de lo que hay en internet o sus amigos conversan”, explica. “Pero, el mayor problema es que al hablar de la palabra sexo, las personas tienden a olvidar todo lo que tiene que ver con el cuidado personal”, dice.
Niñas y adolescentes
Paredes explica que antes de la pubertad es común que niñas desarrollen picazón, enrojecimiento e hinchazón en la piel vaginal. La causa predominante de este fenómeno es la utilización de químicos como perfumes y colorantes de tela. La vaginitis es la principal enfermedad en niñas y mujeres y se da por el hongo Candida Albicans. Se recomienda aseo únicamente con agua sin jabones íntimos femeninos.
Los anticonceptivos
En el Ecuador hay 8’087.914 mujeres. De ellas el 55.5 % son mujeres están edad fértil, entre 15 y 49 años según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT). El 81,4 % de este grupo de mujeres son casadas o unidas y utilizan algún método anticonceptivo: 67,2% utilizan algún anticonceptivo moderno y el 12, 6% algún método tradicional. Los anticonceptivos preferidos son el implante subdérmico con 38.8 %, inyectables con 19.4 %, y la esterilización femenina con 18.1 % respectivamente.

Ministerio de Salud Pública (MSP) instauró un reglamento para regular el acceso y la disponibilidad a métodos anticonceptivos en el Sistema Nacional de Salud, el 25 de marzo de 2013.

Dicha normativa tiene como objetivo que las mujeres y hombres del país dispongan de “información, asesoría y entrega de métodos anticonceptivos a través de sus establecimientos de salud, siendo obligación de estos garantizar el acceso a los mismos de forma gratuita y oportuna, incluyendo la anticoncepción oral de emergencia (pastilla del día después) a toda la población en general, en especial a adolescentes, jóvenes y mujeres que lo requieran”. Elizabeth utilizó este recurso. Fue a un centro de salud ubicado en Quito para que le indiquen cuales eran sus opciones para métodos anticonceptivos.
Consecuencias fatales por la vergüenza
La Dr. Paredes recalca la preocupación que tiene por la desinformación de las mujeres en el cuidado de su cuerpo. Por ejemplo, actualmente, según ella, se está utilizando más el uso de anticonceptivos por inyección por ello, hay un aumento en casos de enfermedades de transmisión sexual. “No se trata solamente de no quedarse embarazada sino de protegerse”, asegura.

Lista de enfermedades de transmisión sexual más comunes:
Clamidia: es provocada por la bacteria llamada chlamydia trachomatis. Es la ETS de causa bacteriana más frecuente. Cuando si hay sintomatología, se caracteriza por secreción vaginal o uretral amarillenta, maloliente, sangrados irregulares en las mujeres, fiebre y malestar general.
Gonorrea: Es similar a la clamidia y está producida por la bacteria gonococo o Neisseria gonorrhoeae. Los síntomas suelen aparecer 2 semanas después del contacto sexual. En mujeres produce fiebre, dolor en las relaciones, flujo vaginal verde o amarillento, sangrados irregulares, dolor abdominal y vómitos.

Virus del papiloma (VPH): Es la ETS más conocida y es la causante principal del cáncer uterino. Según Paredes un 80% de mujeres podría tener esta enfermedad, pero sólo un 10% mostraría repercusiones.
Sífilis: Los síntomas dependen del estadio en el que se encuentre la enfermedad, pero en general pueden ser: chancro sifilítico (una lesión cutánea redondeada, firme e indolora), eritema generalizado, fiebre, malestar general, lesiones a nivel oral y genital, dolor muscular y adenopatías.