El Premio Casa de las Américas es uno de los galardones literarios más reconocidos de la lengua castellana. Un reconocimiento que se entrega en Cuba desde 1960 a las mejores obras de poesía, cuento, novela, teatro y ensayo. Este año, el investigador ecuatoriano Diego Falconí ganó la categoría ensayo y se une nombres como Jorge Enrique Adoum,Julio Pazos Barrera y Raúl Pérez.
Diego es docente en algunas universidades, como la USFQ o la Universidad Autónoma de Barcelona, y centra sus escritos e investigaciones en el tema de la subjetividad. “Me parece que tanto desde el derecho como en la literatura el sujeto es central”- cuenta. Y el ensayo ganador no es la excepción.
Titulado “De las cenizas al texto. Literaturas andinas de las disidencias sexuales en el siglo XX”, busca traer el debate sobre la disidencia sexual a la matriz andina y a sus poblaciones indígenas, mestizas y afro. Es un trabajo que “andiniza” términos como patriarcado, género y heterosexualidad obligatoria.
“Una persona homosexual andina seguramente tiene una serie de imposiciones que le impiden ser igual que un gay de Estados Unidos. El andino tiene una historia de discriminaciones con respecto a etnia y cultura que le impiden estar en el mismo diálogo”, explica. Propone una reflexión local sobre términos que se gestan en otros países y echar un vistazo a la historia andina con nuevos ojos.
Por ahora, el manuscrito continúa en edición y estará disponible en Ecuador en alrededor de 6 meses. Diego, muy contento con el premio y la recepción que ha tenido el país con la noticia, espera con ansías la publicación del ensayo. “Un texto es para generar debate y el debate no siempre te hace ver simpatico. Estoy esperando que venga esta publicación y sus consecuencias”.
